viernes, 4 de marzo de 2011

Los logros de los hijos

El profesor y mi hija (diente en mano)
En esta oportunidad dedico esta entrada a mi hija, Chela, hoy ha realizado su primera extracción, todo un acontecimiento para un estudiante de odontología. Ni les cuento de los preparativos que deben realizar para llegar a esa práctica. No sé cómo será en otros países pero aquí en una universidad pública donde debes rogar al cielo por conseguir los pacientes que debes tratar, es una prueba de resistencia. Algunos compañeros según me comenta mi hija están a punto de abandonar. No es muy fácil según estoy observando, y este stress es trasmitido a toda la familia. Esta semana me tocó ser el transporte de un paciente pediátrico, luego de culminar mis labores en el trabajo nos lanzamos a las vías de nuestra ciudad que constituyen una prueba de resistencia y habilidad no para esquivar a los otros choferes sino para no caer en los HUECOS que se establecieron para siempre en nuestras vías. Del norte al sur de la ciudad en hora "pico", esto equivalía a tener algo de almuerzo en el carro por si el trayecto se hacía muy largo. Luego del sur al norte con el pasajero-paciente hasta la universidad, esperar en un punto medio y luego nuevamente al norte para recoger a mi hija y su paciente  y llevarlo al sur de la ciudad donde reside. Mientras hacia estos recorridos en uno de ellos pensé en la pregunta: ¿en qué gastas tu tiempo libre? Me creerían si les dijo que ayudo a mi hija a culminar sus estudios. Fueron casi 4 horas dentro de un carro.
El complemento ideal para una zurda, una asistente zurda

Creía que al entrar a la universidad los hijos no necesitarían más de mí, ¡¡¡que equivocada estaba!!!! Debemos estar muy al tanto de lo que ven y viven en ese lugar, y animarlos a ser personas, a no deshumanizarse, enseñarles a ver al prójimo del que habla Jesús en el profesor que desalienta que humilla, y en el profesor que los trata como un padre, aquél que entrega todos sus conocimientos al estudiante; en el paciente con buen ánimo, cortés, humilde pero que es capaz de compartir una merienda con los estudiantes. En fin tantos hechos en que puedes hacerles ver que Dios está presente también en la Universidad.

Así que feliz estamos que el paciente, mi hija y nosotros sus padres hemos realizado la primera extracción. No podía culminar esta entrada sin nombrar a mi hijo Henry, el es” mi GEEK”. Hizo todo lo que estuvo a su alcance para que pudiera seguir accesando desde mi PC a los blog, pero es algo intermitente, algo que escapa de sus manos. Debemos seguir rezando por nuestro país, en cosas tan sencillas como esto, poco a poco nos vamos acostumbrando.
Dios nos guarde.

1 comentario:

A Real Pilgrimage dijo...

Me sirve mucho lo que compartes!! Gracias por esta sabiduría materna!! Tienes una familia muy bonita Mariauxi!!

Señor, te creo.

Reflexión al Evangelio Jn 20,24-29 Día de Santo Tomas. Cuantas veces Señor me has escuchado decir: sí, yo creo, cuantas veces lo...